¡Muy buenas a todos!
La reflexión de hoy ha sido, para mí, uno de los grandes aprendizajes desde que decidí apostar por mi vida.
De inicio toda tu obsesión es bajar peso y el numerito de la báscula, pero con el paso del tiempo aprendes que lo importante de cambiar tus hábitos va mucho más allá de ese número. Lo que debes poner en valor, porque es lo que realmente importa, es tu mejora de salud, poder amarrarte los cordones de los zapatos o subir una escalera sin necesidad de una bombona de oxígeno, poder jugar con tu hijo y tirarte al suelo a hacer un puzzle sin miedo a no poder levantarte. Evidentemente, en mi caso, he podido mejorar todo eso porque bajé de peso, pero bajar de peso no era el objetivo, el objetivo era la SALUD y bajar de peso el resultado de haber cambiado mis hábitos.
Puede parecer un juego de palabras sinsentido, pero creedme que es mucho más importante de lo que parece. Cuando tu objetivo es perder peso, obtenida la cifra deseada (en caso de que lo consigas) el objetivo se ha cumplido y se abandona.
Cuando tu objetivo es vivir con salud, es una meta continua, un proceso que nunca acaba, es decir una apuesta permanente por tu vida. Por eso, yo no hago dieta, con principio y final, yo cambié mis hábitos para tener una vida sana hasta mi final.
¡FELIZ VIDA!
Así es… pero es tan difícil. Que para llegar a esa actitud tendríamos que pasar por especialistas que nos enseñe y que hacer o actuar en los momentos que te traicionan el subconsciente! Gracias a migo eres un ejemplo a seguir..!